Con muchas visioné Secuestrados, el thriller del joven director Miguel Ángel Vivas que algunos críticos hypearon a gusto el último festival de Sitges y que al parecer nadie quiso programar en el circuito de salas comerciales.
La peli narra una noche donde una familia que se acaba de mudar a un chalé son asaltados por un trío de ineficaces (ineficaces porque sino la peli duraría tan solo 30 minutos) ladrones.
Mmmm, lo mejor y lo peor de la película parten del mismo punto, Vivas decide rodar esta peli utilizando tan solo un puñado de secuencias largas plus también usa en algunos momentos la pantalla partida para proporcionar simultáneamente al espectador el punto de vista de 2 personajes. Esta técnica permite dar una sensación más realista y de inmediatez al film que es lo que ya se buscaba y lo que consigue en las escenas más impactantes perooooo…… la longitud de las secuencias llega en algunos momentos a rozar lo innecesario, plus el efecto pantalla partida se vuelve molesto en varias ocasiones, sobretodo porque ya para evitar la saturación sensorial, en una de las mitades de la pantalla no ocurre nada mientras que en la otra sí, convirtiendo de esta manera dicho recurso en una virguería estilística que no aporta nada a la narración. Así pues, tal y como he descrito, la dirección que por un lado es muy buena, tiene este particular problema de base. Con respecto a los actores, todos correctos según estándar español, aunque yo hubiera podido pasar sin tener que escuchar a la niña sollozar durante media peli, puesto que a los 5 minutos ya me tenía de los nervios. El guión, correcto para el argumento de la película, con un principio impactante y un final gore, aunque me he quedado a cuadros con el ladrón que se pasa media película hablando mal en castellano y luego se pone a hablar como si fuera de Albacete de toda la vida, curioso cuanto menos. Le doy un 6/10.
Recomendado especialmente a los fans de Sálvame.
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